El plantel de Central retomará el lunes los entrenamientos en Arroyo Seco con la incorporación de Maximiliano Lovera, de baja en los últimos partidos por lesión. El canaya se prepara para recibir a Atlético Mineiro el martes 7 de mayo y Miguel Russo hará cambios, entre ellos para permitir la vuelta del delantero. La dirigencia, en tanto, define el fin de semana la estrategia legal para responder el martes a las acusaciones que elevó Peñarol en la Confederación Sudamericana de Fútbol por los incidentes en el partido que se jugó en el Gigante el pasado jueves 4.

Lovera no jugó en las últimas semanas por una lesión muscular. El delantero no participó en Belo Horizonte del partido con Atlético Mineiro y tampoco en Venezuela ante Caracas. Pero ayer recibió el alta médica y el lunes se sumará a los entrenamientos junto al plantel. Su vuelta es muy esperada dado que el bajo rendimiento del juego ofensivo de Central fue el gran problema del equipo en los partidos de la Libertadores. Para recibir a los brasileños el 7 de mayo es muy probable que Lovera vuelva a la titularidad. Pero recién sobre el fin de la próxima semana Russo probará los cambios para el relevante juego con Atlético Mineiro. El canaya necesita los tres puntos en la próxima fecha de la Libertadores para conservar las chances de clasificar a los octavos de final a dos partidos del cierre de la zona de grupos.

El partido se jugará sin público en el Gigante de Arroyito por la sanción impuesta por la Confederación Sudamericana de Fútbol a los canayas. El club logró identificar al socio que agredió con un piedrazo a los jugadores de Peñarol en el partido de la primera fecha. Incluso el hincha fue imputado por “lesiones leves dolosas agravadas por ser cometidas en un espectáculo deportivo, en concurso real con el delito de promoción de tumultos y desórdenes públicos” y como medida preventiva no podrá asistir a la cancha por dos años. Pero la dirigencia canaya le abrió un expediente por su conducta que derivará en su expulsión en la condición de socio una vez que sea condenado por la Justicia. El socio fue identificado después de revisar minusociamente las cámaras del estadio. Una vez que se detectó su ingreso por molinetes se pudo indentificar y fue arrestado en su domicilio, aunque recuperó la libertad, con condiciones, después de la audencia imputativa. Para los directivos el martes vence el plazo para presentar descargo por la demanda de los uruguayos.